Situada en la planta baja, con terraza y acceso a una gran terraza con vistas al Mediterráneo, esta habitación refleja nuestra interpretación del encuentro entre el sur de Europa y el mar Mediterráneo. La habitación dispone aire acondicionado, es cómoda y luminosa, está decorada en tonos tierra combinados con azul y cuenta con una cama matrimonio, ducha, lavabo y wc.

Las almendras en España son originarias de Asia occidental y el norte de África. Las flores blancas producen almendras dulces, mientras que las rosas producen la variedad amarga. Las sabrosas almendras se cultivan desde tiempos bíblicos y eran muy apreciadas por los griegos y los romanos. Los almendros se extendieron rápidamente por las orillas del Mediterráneo. Los moros fueron los primeros en introducirlos en España en grandes cantidades. Según una encantadora leyenda, un gobernante de Sevilla del siglo XI, el califa Al Mutamid, fue responsable de plantar grandes huertos de almendros por toda Córdoba. Su esposa favorita, Al Rumaikiya, añoraba las nieves invernales de su hogar de infancia en el norte, y para complacerla, Al Mutamid hizo plantar con tanta densidad de almendros las llanuras y laderas que rodeaban la ciudad que cuando florecían todo el campo parecía cubierto por una nevada de finales de invierno.